top of page
TERMINAR CON EL IMPUESTO A LAS GANANCIAS ES DEFENDER EL SALARIO
¡ABAJO EL IMPUESTO A LAS GANANCIAS!

     El impuesto a las ganancias; ese gran robo a los trabajadores que históricamente tuvo su origen en la década infame, fue resucitado por Perón en el '73 y mucho tiempo después modificado por el gobierno de la Alianza y la famosa “tablita de Machinea”. Luego fue defendido por el gobierno Kirchnerista que, cuando la ya no pudo negar la creciente inflación, no tuvo más remedio que modificarlo para descomprimir la situación. En los últimos tiempos del Kirchnerismo muchos dirigentes de las centrales sindicales, con Hugo Moyano a la cabeza, se llenaron la boca de mentiras con la intención de que creamos que estaban combatiendo al impuesto convocando a Paros Nacionales pero sin movilizarse, aislados y sin plan de lucha. Hoy, con el gobierno de Cambiemos, el impuesto a las ganancias nos sigue quitando una parte de nuestro sueldo básico, de horas extras y de feriados trabajados.

     Vale la pena mencionar que, históricamente, el peronismo ha reivindicado el impuesto. Las direcciones sindicales durante la presidencia de Néstor Kirchner y en el primer mandato de su esposa defendieron el impuesto justificándolo como una manera de redistribuir la riqueza y, cuando se alejaron del gobierno, entre otras cosas por la disputa de las cajas de la Obras Sociales, se vieron obligados por su situación política a tomar un reclamo legítimo de los trabajadores que veían como el producto de sus sacrificios se diluía en sus recibos de sueldo. Lo cual desnudó, una vez más, su política de pegar cuando hay algo para negociar. Hoy, a la vista de lo que fue el gobierno K con toda su sistemática corrupción, por lo menos cuesta creer que los fondos se hayan usado para lo que se decía.

     Otro punto que se debe tener en cuenta poder sacar una conclusión más clara de lo injusto del impuesto a las ganancias es el de los subsidios a las empresas. Mientras que a nosotros se nos quitaba nuestro dinero, a las empresas (sobre todo a las de servicios) se les subsidiaban millones de pesos por año para mantener su nivel de ganancia. Dicho por Cristina Kirchner misma en Cadena Nacional, los empresarios se llevaban en pala los pesos de los subsidios.

 

     Un caso para destacar es el de los trabajadores de FATE, que iniciaron un reclamo denunciando que se les había descontado erróneamente y se les devolvió el dinero, contagiando a trabajadores de empresas de otras actividades, por ejemplo Praxair, que reclamaron lo mismo y se les devolvió hasta $60.000.

 

    Ya en el final del gobierno anterior, Mauricio Macri y Sergio Massa tomaron el reclamo y lo hicieron parte de su campaña presidencial con la evidente intención de ganar votos de los trabajadores. Pura demagogia. Hoy, a 6 meses de gobierno macrista, el robo no sólo continúa sino que se ha agravado: en febrero de este año se volvió a modificar el impuesto de tal manera que los trabajadores que estaban exceptuados de pagar por haber ganado menos de $15.000 entre febrero y agosto de 2013, hoy pasan a pagarlo otra vez. En marzo ya se había confirmado que más personas ingresaron a pagar el impuesto de las que habían sido beneficiadas por dicha modificación.

 

     El gobierno K de ayer y el macrismo hoy desnudan esta política de falsa distribución de la riqueza recetada por el Banco Mundial, ya que se le carga de impuestos a los consiguieron un salario que supera la canasta básica (hoy $19.000). Nosotros desde EL PEAJISTA preguntamos: ¿Esto es distribución de la riqueza? Sinceramente no, es un engaño. Hay que distribuir cargando a las empresas, en el caso de nuestra actividad proponemos que las empresas reintegren el impuesto descontado de ganancias y que ellos de esta manera lo absorban con sus enormes ingresos este impuesto.

 

     En nuestra actividad es especialmente importante prestar atención. En nuestras próximas paritarias el grueso de los trabajadores acercaría peligrosamente a los $30.000 brutos, por lo menos en las empresas GCO, AUSOL y AUSA si se tiene en cuenta la antigüedad y eventuales feriados trabajados, que se requiere para pagar ganancias; en algunos casos los superaría. Por lo tanto, los solteros sin hijos superarían con creces los $22.747 brutos que tienen como límite.

     Los dirigentes sindicales parecen haberse olvidado del reclamo: el impuesto fue una de las consignas del acto del 29 de marzo, día en el que se anunciaba que no se iba a luchar por ésta y otras injusticias como la inflación y el tarifazo. Facundo Moyano, Diputado y Secretario General del SUTPA, gremio que agrupa a los trabajadores de dos las principales concecionarias del país (AUSOL, GCO) y muchas del interior, si bien tuitéa su disconformidad con el impuesto, todavía no queda muy claro qué medidas tomará.

​

     A la vista de todo esto y de que la inflacíon anual proyectada para 2016 es de no menos del 40%, de una devaluación del 40%, del impuestazo a la electricidad, el gas y las naftas decimos:


​

EL SALARIO NO ES GANANCIA.
QUE LAS EMPRESAS SE HAGAN CARGO DEL IMPUESTO

​

"Se posiciona como la tercera fuente más importante de financiamiento del Estado, después del IVA y las cargas sociales."

                            eldestape.web

Deja tu comentario

¡Tus datos se enviaron con éxito!

seguinos en:

  • Facebook Long Shadow
  • Twitter Long Shadow
  • Google+ Social Icon
bottom of page